martes, 17 de septiembre de 2013

TIL por sorpresa

El Tratamiento Integrado de Lenguas (TIL) es un decreto por el cual "se garantiza una enseñanza de excelencia", según la Consellera d'Educació, Juana Maria Camps. La teoría de este decreto es aumentar las horas de inglés en las aulas. En la práctica es aumentar el inglés en las aulas pero con profesores que aun no han sido lo suficientemente preparados para afrontar este nuevo reto, así como disminuir las asignaturas impartidas en catalán.

El problema llega cuando esto se impone como un "decretazo" y no se escucha, en ningún momento, a quienes tendrán que sufrirlo. Miles de profesores y alumnos en contra de este decreto han alzado la voz, pero lo único que han conseguido ha sido incrementar el odio de la derecha más rancia hacia todo aquello que no siga el "status quo" determinado por ellos. En una carta enviada hace dos días por Antoni Camps Casasnovas, diputado autonómico del Partido Popular y miembro de la Comisión de Educación del Parlament de les Illes Balears (quien necesita firmar así para sentirse alguien importante), escribió una carta en el Diari Menorca, utilizando un derecho que conoce bien: la libertad de expresión, pues se expresó con total libertad y sin demostrar ningún tipo de benevolencia hacia el gremio de profesores.

Al parecer, lo que más le preocupa es que los profesores vayan dando "discursos políticos" en las aulas, en lugar de dar la materia que les corresponde, alegando que "su preocupación no es pedagógica, sino política". Tengo 24 años y lo poco que se de política es porque lo he leído en los periódicos, lo he visto en la televisión o he participado en debates que casualmente surgían en las aulas. De haber prestado más atención a esos debates, y me doy la libertad de hablar ahora por todos en general, quiero creer que estos señores no gobernarían con la mayoría absoluta con la que lo hacen.

"No es de recibo que con el dinero de todos estemos pagando a profesores que enseñan mal, deforman o manipulan, o no muestran ningún interés en reciclarse", escribió el diputado autonómico del Partido Popular y miembro de la Comisión de Educación del Parlament de les Illes Balears. Lo que no es de recibo es que con el dinero de TODOS se pague a políticos ineptos, incultos, corruptos, mal educados y mal formados para desarrollar su trabajo. El resto de los mortales nos formamos profesionalmente para adaptarnos a un tipo de trabajo en concreto, aunque luego no sirva para nada, dadas las circunstancias en las que su partido nos ha sumido.

Lo que no es de recibo es que con el dinero de TODOS se paguen los viajes de ida y vuelta de estos señores porque residan lejos de su lugar de trabajo. La mayoría de los mortales no podemos permitirnos coger un avión cada vez que tengamos que ir a trabajar.

Lo que no es de recibo es que con el dinero de TODOS quieran suprimir la asignatura de educación para la ciudadanía y obligar a que la asignatura de religión cuente para la media en selectividad, cuando habla de la necesidad de una "educación moderna y de calidad".

Lo que no es de recibo es que esta "persona" hable de querer "medir los resultados de los profesores y pedir explicaciones si no se alcanzan los objetivos". Y créame en este punto, TODOS, y no la mayoría de los mortales, les pedimos explicaciones constantemente a los políticos, los cuales se encargan bien de distorsionar la realidad y vender humo.

Sinceramente, más miedo me da un diputado autonómico del Partido Popular y miembro de la Comisión de Educación del Parlament de les Illes Balears preparando a los jóvenes para un futuro que él y los de su entorno se han encargado de destrozar, que un profesor que lo peor que hace es enseñar y defender la cultura catalana, menorquina, balear, española... En ningún momento he oído a esos profesores, a los que en ese artículo solo falta llamarles "bolcheviques", hablar de independentismo; es más, cada vez que he escuchado esa palabra entorno a este tema ha salido de la boca de alguno que en lugar de colgar de las fachadas lazos catalanistas o lucir camisetas verdes, de sus balcones cuelgan trapos de tela con el aguilucho, el pollo o la gallina.

S.



domingo, 24 de marzo de 2013

No es país para hipócritas

Este señor, llamado Esteban González Pons, y que es Vicesecretario General de estudios y programas del PP, es también un grandisimo hipócrita, como casi todos los de su "cuadrilla". En este vídeo podemos verle incitando a la rebelión, igual que se hizo en Egipto para derrocar a Hosni Mubarak, para acabar con el gobierno socialista de Jose Luís Rodríguez Zapatero. 

Tiene la poca vergüenza de hablar de "democracia de calidad" y de decir que el 100% de los españoles "están hartos del paro, la crisis económica, la crisis de valores, la crisis social, política y la depresión institucional". ¿Por dónde empiezo?

La democracia de calidad será inexistente mientras sigan cargándose el Estado de Bienestar. No hay democracia sin bienestar social. Mientras sigan recortando en sanidad, educación, pensiones, etc. y ellos sigan subiéndose el sueldo, costeandose viajes, aceptando la corrupción mientras se quedan de brazos cruzados, NO HABRÁ DEMOCRACIA. Esto obviamente nos lleva a la crisis social que menciona nuestro amigo, aquí en el vídeo. Una cosa le diré: no se tiene crisis social si la sociedad vive en paz y en libertad y no agobiada porque vayan a perder la casa, porque no puedan costearse una educación para sus hijos, porque no puedan ponerse enfermos por no poder pagar los gastos sanitarios o porque les falte dinero para poder comprar el pan.

Que los españoles estaban hartos del paro en 2011 es verdad. Pero que ahora lo que están es hasta las narices de recordar discursos demagógicos de estos señores y ver que el paro no hace más que aumentar, que la crisis de valores la han creado ellos solitos, al igual que la crisis social y la depresión institucional, también es cierto. La crisis económica, y sin que sirva de precedente, tienen razón los del Partido Popular y sí es herencia recibida. La herencia recibida de nuestro querido y muy recordado José María Aznar. 

Rajoy nos dijo en 2009 que "subir los impuestos hoy, sería a la larga más paro y más recesión" y que los españoles tendríamos que "pagar los errores y gracietas" de Zapatero. ¡Quién iba a decir que tenía razón! Aunque lo haya tenido que ponerlo a la práctica Rajoy para poder dársela... No estamos solo pagando los errores de ZP, sino que a esos errores ahora hay que sumarles lo que este señor está comentiendo, que no son más que crímenes contra natura. Ellos lo llaman "subida temporal de los impuestos", yo prefiero llamarlo primero hacer demagogia y después dar por cu**. 

Cospedal reitera que "nunca, nunca, nunca, se ha salido de la crisis subiendo los impuestos". Creo que voy a ahorrarme cualquier tipo de comentario al respecto puesto que muy probablemente hoy lo tacharían de violencia y agresión. 

Y a Soraya S. de Santamaría le parecen vergonzosas unas cosas rarísimas! Cuando estamos en la oposición, SI, pero cuando toca demostrar que luchan por el pueblo, bien se encargan de aplastarlo. Y esto señores, no es culpa de los de arriba, sino de los de abajo que nos dejamos manejar por esta GENTUZA y votamos lo que no hay que votar, pero claro... Con la educación de hoy en día, que más podemos pedir? Eso es lo que quieren, y eso es lo que han conseguido. 

S.






miércoles, 5 de diciembre de 2012

La pasión de Rouco

Desde luego este país va dando pasos hacia atrás en lugar de modernizarse y tirar para adelante, o al menos intentarlo.

Sí, España es un estado aconfesional y no laico, como bien dicta la Constitución, ley suprema para todos los españoles. La aconfesionalidad de un estado significa que este no reconoce como oficial ninguna religión en concreto, aunque puedan existir acuerdos entre las instituciones religiosas. La primera parte de la definición no sucede en este país, la segunda desde luego que si.

Este gobierno es incapaz de pensar en la ciudadanía primero. El problema viene cuando se juntan los del gobierno con los que intentan dominar el tinglado. "Personas" como Rouco Varela, cardenal primero de España (si eso es algún tipo de título honorífico), declara que la educación para la ciudadanía "invade totalmente la libertad religiosa y el derecho de los padres a la educación moral de sus hijos".

1. ¿Invasión de la libertad religiosa? ¡De qué! Se propuso la asignatura de educación para la ciudadanía como una alternativa, una asignatura al margen de la religión, equivalente a la antigua ética, cualidad de la que muchos carecen y no tienen la suerte de aprender en casa; véase personajes como el presidente del gobierno o el mismo cardenal.

2. ¿Educación moral de los hijos? En primer lugar, los padres tienen derecho a elegir si quieren que sus hijos den religión o no. No es un deber. El problema es que en sitios como España, Madrid por ejemplo, socialmente vemos como los colegios públicos, cada vez más, se van llenando de personas que vienen del extranjero y no queremos juntar a nuestros hijos con ese tipo gente. Esa gente, por cierto, es la que enriquece aun más la grandisima cultura que tiene este país. Entonces, ¿qué hacemos? Llevamos a nuestros hijos a colegios privados o concertados (la grandisima mayoría católicos o dirigidos por algún tipo de secta como el Opus o los legionarios de cristo), y ahí creemos que están a salvo. Nada más lejos de la verdad, pues no les ofrecen la libertad de poder elegir por ellos mismos; crean mucho más recelo hacia las personas religiosas porque no saben hacer más que oprimir; y carecen de enseñanzas como la educación sexual por ejemplo, algo muy importante, no solo por temas de posibilidades de embarazo (tema que ya sabemos como piensa la iglesia y como lo transmite a sus alumnos), sino por la cantidad de enfermedades existentes, los contagios o la cura de ellas.

En segundo lugar, que me digan qué tipo de moralidad hay en que los que enseñan religión, los que se hacen llamar profesores de religión, sean elegidos por obispos, cardenales, curas o el mismísimo papa, pero después sean pagados fielmente por el Estado. Todos los españoles pagamos rigurosamente por igual un 0,7% del IRPF a la financiación de la iglesia católica (únicamente) sin que haya ningún tipo de distinción entre sus fieles seguidores y el resto de los mortales. No pido que se les retire el sueldo, pues todo trabajo es digno, pero deberíamos exigir que fuesen pagados, no con el dinero de todos los contribuyentes, sino con el dinero de la institución católica, de sus fieles seguidores y de los padres que quieren que sus hijos vayan a religión. Mi dinero que se destine a otra cosa, a mi parecer muchísimo más útil que aprender diez mandamientos exigidos por personas que ni los cumplen. Mucha gracia me hace a mi cuando tengo que recordar a la Santa Inquisición presente en España en el siglo XV.

Si España es un Estado aconfesional, no importa si la religión católica es la practicada por la mayoría, todas, repito TODAS, tienen cabida en este país, y eso es algo que se les olvida, tanto al Gobierno como a la iglesia católica.

Me quedo con el lema que tan lejos queda y tan poco se escuchó: "Más gimnasia y menos religión".

S.

viernes, 19 de octubre de 2012

Mariano Rajoy y los recortes de la muerte: Parte I

Si la semana pasada el Ministro de Educación y Cultura hablaba de "españolizar a alumnos catalanes", esta semana no se ha quedado atrás tildando de "irresponsables" a padres y alumnos por participar, según él, en una "huelga política".

Nuestro querido ministro cree que no hay ningún motivo para protestar acerca de los recortes en educación, porque "no se han aumentado el número de alumnos por clase, solo se ha felixibilizado", y no se han "disminuido las becas". Aunque en realidad, hay que recordarle al Ministro que en primaria se ha pasado de 27 a 30 alumnos por clase, y en secundaria de 30 a 36 alumnos. Y por lo visto también se olvida que el Gobierno ha disminuido en 185 millones de euros el presupuesto dedicado a las becas educativas.

La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), en su informe anual sobre educación, destaca que España es el primer país con fracaso escolar de la UE. En nuestro país, uno de cada tres jóvenes entre 15 y 24 años, abandona los estudios antes de acabar la ESO; el fracaso escolar medio en Europa es uno de cada cinco.

Según la UNESCO, el fracaso escolar viene dado por el agobio que sufre España con la crisis económica. Mi opinión es otra muy distinta. La crisis ha dificultado el acceso de estudiantes a la vida laboral, pero no ha sido la culpable del fracaso escolar. Sin que el Gobierno ofrezca las herramientas necesarias y adecuadas que permitan a los jóvenes formarse profesionalmente, no habrá posibilidad de empleo.

Mientras el Gobierno siga dedicando tiempo y esfuerzo en priorizar cualquier otro sector que no sea la educación, en primer lugar, y la sanidad y las pensiones en segundo, no podremos hablar de un Estado de Bienestar. La educación pública debe ser el pilar básico de ese Estado. El problema de este país, es que votamos a gobernantes que prefieren invertir el dinero en fomentar la educación privada y elitista, en la iglesia o en el sector militar.

Algunos datos estadísticos sobre cuatro variables: la Casa Real, las Cortes Generales, Educación, Cultura y Deporte y el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación.

*En los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2011 se destinó a la Casa Real una suma de 8.430.000€. En 2012 eso cambia, y haciéndonos un favor al resto de ciudadanos, la cifra disminuye en un 2%, pasando a ser 8.260.000€. Se ha establecido que para 2013, esa cifra disminuya otro poco más, un 4% (7.930.000€).

*En cuanto a las Cortes Generales (abarcando a los diputados y senadores), se pasó de 216'4 millones de euros en 2011, a 206'61 millones de euros en 2012, lo que representa una disminución del 4'5%. Esto está bien, viendo que nuestros queridos representantes cobrarán menos que la Casa Real.

Lo curioso viene cuando analizamos las dos siguientes variables:

*En educación, deporte y cultura pasó de destinarse 3.918'25 millones de euros en 2011, a 3.093'31 millones de euros en 2012, lo que supone una disminución nada menos que del 21'2%. Para los PGE de 2013 se ha recortado aun más, pasando a gastarse un 17'2% menos que en 2012, lo que deja a los fondos para la educación en 2.561'18 millones de euros. Si lo sumamos, en un año se ha recortado un 38'4%. Ahora los recortes en la Casa Real y las Cortes no parecen tan generosos...

Si analizamos la educación en cuanto al PIB es mucho más notorio. Mientras que en 2011 la educación representaba un 2'4% (mientras en países como Finlandia se situaba entorno al 5'7% de su PIB), en 2012, la educación española representa SOLO el 1'9% del PIB.

Pero sigamos...

*El Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación pasó de disponer, en 2011, de 2.645'71 millones de euros, a tener, en 2012, 1493'20 millones de euros. Esto supone un recorte a casi la mitad de lo disponible el año anterior, concretamente es una disminución del 43'6%. Pero eso no se queda aquí. Los PGE para 2013 recortan otra vez un 10% más, dejando al Ministerio con tan solo 1.343'22 millones de euros.

A todo esto, hay que añadir que los PGE establecen que "durante el año 2012 el Estado entregará, mensualmente, a la Iglesia Católica 13.266.216,12 euros". Repetiré por si no ha quedado claro. Los PGE establecen que el Estado entregará, MENSUALMENTE, a la Iglesia Católica 13.266.216'12 euros.

Acabo con la última cifra escandalosa que supone esos 9 millones de votantes que pensaron que con un cambio de gobierno esto iba a arreglarse. Para aquellos ingenuos aquí está la prueba de que, no solo no se ha arreglado, sino que nos habéis llevado a todos por delante. A todos vosotros, ¡Muchas gracias! Ahora, por fin, os lo pensaréis dos veces.

S.




miércoles, 10 de octubre de 2012

Independència day

El sentimiento nacionalista catalán parecía ser un concepto histórico y acabado, pero por gente como el Ministro de educación y cultura, el Ministro de justicia o por los millones de ciudadanos que no entienden lo que es tener otro tipo de cultura que no sea solamente la española, este sentimiento ha cogido más fuerza que nunca últimamente.

Según Gallardón, "ni España es el problema ni la independencia, la solución". Si tan preocupado está Albertín de la situación catalana, que cumpla con Cataluña, él y su gobierno. El estado central es quien incumple con las promesas de inversión en sus presupuestos. Aunque creo que está más preocupado por la situación de España en general, puesto que sería un golpe bajo al país, dado que Cataluña es un pilar económico básico del mismo.

Y luego surgen comentarios como el que ha dado el señor Wert, alegando que hay que "españolizar a los alumnos catalanes". ¿Españolizar? Como una ex alumna menorquina-catalana y que ha estudiado lengua y literatura castellana, algo que el resto de españoles olvida que estudiamos, creo que el término españolizar pretende descalificar y humillar a la cultura catalana. No hablo de soberanía; no hablo de nacionalismo; no hablo de independencia; hablo de cultura: un pueblo con un modo de vida y costumbres.

En Madrid hay solo una cultura. Pero en Cataluña, Galicia, País Vasco, Valencia y Baleares, hay más de una. Y con la riqueza que tiene España a nivel cultural, no se ha aprovechado esta oportunidad. Hay que escuchar discursos populistas y banales, de uno y otro bando, mientras este país se hunde cada vez más.

No defiendo ninguna de las dos posiciones, pues me parecen desmesuradas. Unos no escuchan y otros rememoran hechos históricos de hace más de 40 años, que deberían dejarse ya a un lado.
El problema es que se dio a todas las comunidades el mismo estatuto, ya fuese por la vía rápida, o por la vía lenta, creando así una igualdad formal inviable en la realidad actual, no diferenciando entre elementos culturales ya existentes.

Abogo por un estado federal, aunque con 17 comunidades autónomas parezca imposible. Como bien dijo Carme Chacón: "El Estado autonómico está agotado y la solución está en el federalismo".

S.

viernes, 5 de octubre de 2012

La bella y las bestias

Cospedal compara el 25S con el 23F (link)

Cospedal, secretaria general del PP y gran amante de la historia de España, compara el 25S con el golpe de estado de Tejero, el 23F.
Obviamente, aun no le ha quedado claro, ni a ella, ni a sus "colegas" que lo que quiere el pueblo es tapar la boca a todos aquellos que han elegido libremente a este gobierno y que han elegido libremente nuestro modelo; un modelo que dista mucho de ser democrático.

En teoría son los manifestantes los golpistas y los bestias, a los cuales hay que hacer frente. Tocaban nada más y nada menos que un policía por cada 4,4 manifestantes. Si el gobierno dedicara el mismo tiempo y el mismo esfuerzo en proporcionar un médico o un profesor por cada 4,4 personas, en vez de hacer frente a manifestantes en busca de algo mejor, España sí estaría en camino de ser un Estado de Bienestar triunfante.

Los manifestantes "ocupan la casa que es de todos", dice Cospedal. Todo ello, por tanto, "es tratar de contrariar la voluntad popular". Gran frase de la "bella" que lucha por pueblo, porque ahora yo le pregunto: ¿A qué se refiere con voluntad popular? ¿La voluntad de los populares, o la voluntad del pueblo? Desde luego, la voluntad del pueblo no se contraria porque unas personas, según el gobierno 6000 solamente, se manifiesten delante de la Cámara baja pidiendo un país más democrático y un Estado de Bienestar real. Lo único contrariado son los "populares", que ven como cada vez más, el pueblo, la gente para la que supuestamente trabajan, está descontenta con su forma de llevar a cabo su labor.

El 23F trató de acabar con la democracia intentando imponer de nuevo una dictadura militar. Pero esa transición democrática que no consiguió frenar, ¿llegó realmente a ser una democracia? Un Jefe de Estado elegido a dedo por su antecesor, una bandera que seguía con el águila, después refugiada en una tierna gaviota y el recuerdo permanente de esos 40 años de humillación por parte de un hombre de tan baja estatura como igualdad impartía.

El único parecido que veo yo entre una fecha y otra... el resultado: fracaso, pero con posibilidad de triunfo si todos llevamos a cabo este golpe juntos.

S.